Ubicado en la céntrica Ronda del Corpus de Salamanca se alza el Monasterio del Corpus Christi de las hermanas Pobres de Santa Clara, también conocidas como Clarisas. Su iglesia, con la puerta siempre abierta y un cartel que invita a entrar: “Jesús te espera”, atrae a diario a decenas de personas en busca de un respiro del ajetreo cotidiano y un lugar donde escuchar a Dios y encontrar la paz. Este pequeño oasis es una de las más de 70 capillas de Adoración Eucarística Perpetua en España, abiertas las 24 horas los 365 días del año, permitiendo que los fieles se acerquen al Señor en cualquier momento. Este servicio es posible en Salamanca gracias a la colaboración de unos 250 adoradores que, más allá de la misa, se organizan en turnos para acompañar y velar a Jesús Sacramento.

El pasado sábado la Capilla de la Adoración Eucarística Perpetua de Salamanca celebró su décimo aniversario. En esa misma fecha de 2014, el entonces obispo de Salamanca, Carlos López, presidió una Eucaristía solemne en la iglesia de San Juan de Sahagún, seguida de una procesión con el Santísimo hasta la capilla del Monasterio del Corpus Christi donde quedó expuesto para ser adorado permanente.

Desde entonces, la capilla ha mantenido sus puertas abiertas, siendo un refugio espiritual para cientos de personas, salvo los tres meses durante la pandemia de la Covid-19, que motivó su cierre desde el 15 de marzo hasta 15 de junio de 2020. El 16 de octubre de ese mismo año hubo un segundo confinamiento pero la capilla permaneció abierta gracias a que “se hicieron salvoconductos para los adoradores que venían de fuera”, como recuerda la responsable de la Adoración Eucarística Perpetua, Mª Ángeles García. Sin embargo, el 16 de febrero de 2021 las horas de adoración se redujeron de 7:00 a 21:00 horas. Ese horario se mantuvo hasta el 11 de abril, el día de la Divina Misericordia, cuando la capilla se vuelve abrir las 24 horas del día, de manera permanente.

Mari Ángeles recuerda los comienzos de esta capilla de adoración con un centenar de adoradores comprometidos a pasar al menos una hora semanal acompañando al Santísimo, en cualquiera de los cuatro turnos que se establecieron, y que aún continúan: de mañana, de tarde, noche y madrugada.

Jesús Manuel Guerra es uno de los adoradores que ha estado presente desde el principio. Recién jubilado, mientras se encontraba en una eucaristía en la parroquia de San Juan de Sahagún escuchó al sacerdote y misionero de la Santísima Eucaristía, Justo Antonio Lofeudo, explicar qué era la Capilla de Adoración Eucarística Perpetua y su intención de implantarla en Salamanca. “Nos entregaron unos folletos de información y me pareció una oportunidad para formar parte de este servicio y dedicar mi tiempo al Señor”.

Con emoción, Jesús Manuel recuerda la Eucaristía de la inauguración de la capilla y la procesión del Santísimo bajo palio hasta la capilla aquel 27 de abril de 2014. En su caso, fue uno de los que portó el palio. “Fue una emoción grandísima el poder hacerlo”, expresa.

Actualmente, Jesús M. Guerra ocupa el turno de 6:00 a 7:00 de la mañana, un tiempo que disfruta plenamente, “es una hora que estoy muy a gusto”. Reconoce que se siente contento y experimenta “una paz interior muy grande” al acompañar al Señor durante esa hora. Cada adorador tiene libertad para orar como desee. “Unos rezan el Rosario, otros se aferran a la Palabra de Dios; hay Biblias, libros y documentos con oraciones para guiar la oración que les puedes dedicar un tiempo”, explica Jesús Manuel.

Con entusiasmo, Jesús M. Guerra anima a la gente a acudir a la capilla de Adoración, “una hora se te pasa sin darte cuenta. He llevado a amigos y ven también se les pasa rápidamente”.

En la actualidad el número de adoradores ha crecido a 244. Gracias a ellos, a las hermanas Clarisas y a los fieles que acuden a diario se asegura que el Señor nunca esté solo y permiten que su amor llegue a más personas, cumpliendo así una valiosa misión dentro la Iglesia.

La mayoría de los adoradores son de Salamanca, pero también acuden de los pueblos del alfoz, como Carbajosa de la Sagrada, Castellanos de Moriscos, Doñinos, Monterrubio de la Armuña, San Cristóbal de la Cuesta, Santa Marta de Tormes, Zarapicos, Santa Marta de Tormes, Villares de la Reina o Villamayor. La responsable de la Adoración Perpetua agradece su fidelidad y anima a otros a unirse. También subraya la necesidad de fortalecer el turno de madrugada, que como indica, actualmente “estamos doblando la mayoría”.

La capilla ofrece diariamente la celebración de la Eucaristía a las 8:00 de la mañana y los miércoles a las 19:00 horas. Además, existe la posibilidad de acercarse al sacramento de la Penitencia, en varios horarios: todos los días de 6:30 a 8:00 horas -excepto los miércoles-; los martes, de 18:00 a 19:30 h.; los miércoles de 17:30 a 18:30 horas; los jueves, de 10:30 a 13:00 horas; y los viernes, de 20:00 a 21:30 horas.

Las personas interesadas en ofrecer una hora de su tiempo al Señor en esta práctica, pueden inscribirse directamente en la capilla de la Adoración Eucarística Perpetua, en la Ronda del Corpus 48, o comunicarlo por vía telefónica o WhatsApp al número 608 316 910.