La fotografía de hoy es de Alberto Huertas. Imagen de la calle Palominos con la Clerecía de fondo.
Según cuenta Salamanca en el Ayer, la inclinada orografía de la zona provocó que la escorrentía de las aguas pluviales esculpiese un escarpe que los antiguos salmantinos utilizaron como base para construir la cerca vieja.
La calle perdió su tramo superior, a finales del s. XIX, con el trazado de la Rúa Nueva. Al parecer era frecuente encontrar palomas torcaces a lo largo de la pendiente, razón por la cual adoptó el nombre de «Palombino» (crías de palomas silvestres) que con el tiempo se transformó en «Palomino» y se pluralizó a «Palominos». Se la menciona en documentos del siglo XIII como «cal de Palombino» y Gil González Dávila la nombra como «Calle de Palomino» en 1606.