Cordeles, cañadas y caminos del nordeste de Salamanca para reencontrarse con la naturaleza
La llegada de la primavera -estación que estrenamos este fin de semana- es una invitación a salir a reencontrarse con la naturaleza. Las actividades al aire libre, en esta situación de pandemia en la que todavía nos encontramos, es la mejor opción para disfrutar del tiempo libre y descubrir nuevos parajes y paisajes de la provincia.
La provincia de Salamanca cuenta con numerosas vías pecuarias que, además de un peculiar encanto, tienen mucha historia. Recorridos que se han convertido en una opción para realizar senderismo y que, al mismo tiempo, permiten conocer la historia de los pueblos por los que transitan. Y si hay una zona particularmente rica en vías pecuarias es el nordeste salmantino, desde cañadas a cordeles, veredas y coladas. En conjunto suman varios cientos de kilómetros de longitud, con sus descansaderos y sus charcas.
Cordel y cañada de las Negras
Desde Ledesma, su recorrido continúa hasta San Pelayo de Guareña, Aldearrodrigo y Zamayón, para continuar en los límites entre Valdelosa y Calzada de Valdunciel hasta Topas, donde se une a la Cañada de la Plata. Uno de los tramos de este cordel sigue hacia el norte y, aún en el término municipal de Topas, se desvía hacia el este para, ya como cañada, bordear los límites norte de Aldeanueva de Figueroa y Parada de Rubiales.
La Cañada de Mostrencas
La denominada cañada de Mostrencas, también conocida como Cañada Real de Merinas, con una longitud de algo más de 28 kilómetros, arranca en Rágama y llega hasta Salmoral, pasando por Cantaracillo,. Bóveda del río Almar o Mancera de Abajo.
Cañada Real de la Plata o Vizana
Aunque su recorrido arranca en el sur de la provincia -en Puerto de Béjar, procedente de Baños de Montemayor (Cáceres), termina en Topas, y adentrándose posteriormente en la provincia zamorana.
Cordel de Salamanca a Medina del Campo
Parte desde Salamanca -siguiendo el paseo de la Estación- hasta Castellanos de Moriscos, Gomecello, Cabezabellosa de la Calzada, Pitiegua, El Pedroso de la Armuña. Una vez pasado este municipio, sigue hasta Cantalpino, Villaflores y la raya entre Tarazona y Cantalapiedra. En este punto se bifurca, siguiendo como cañada hacia Cantalapiedra, mientras que otro ramal (colada) sigue hasta la provincia de Valladolid.
Cordel y calzada de Toro
Parte desde Villares de la Reina hasta San Cristóbal, La Vellés, Arcediano y Aldeanueva de Figueroa. Al norte de este municipio cruza la cañada de las Negras y se interna en la provincia de Zamora.
Cordel de Alba de Tormes a Cantalapiedra
Desde la Cañada de la Plata, a la altura de la Sierra de Herreros, en dirección hacia Medina del Campo. En Cordovilla se cruza con la vereda de Peñaranda al Campo Charro. En Villoria se incorpora el cordel de Salamanca a Ávila.
Colada de la Armuña
Discurre desde Villares de la Reina a Parada de Rubiales, por donde se adentra en la provincia zamorana.
Caminos de Monterrubio de la Armuña
En la zona de la Armuña, en concreto en el municipio de Monterrubio de la Armuña, tenemos también la opción de recorrer los caminos señalizados de la alquería de Mozodiel (algo más de 5 kilómetros), de la Cárcava (1,2 km) y el Cerro del Viso (1,5 km). Todos son de dificultad baja y llevan al visitante por los campos de cultivos y las vistas sobre la comarca.