La sala de exposiciones de la Torre de los Anaya acoge una exposición que homenajea al pintor y escultor Fernando Mayoral en la que se muestra una selección de obras pictóricas y escultóricas realizadas a lo largo de su trayectoria artística.
Se exponen 75 obras pictóricas, entre las que se encuentran pinturas al óleo, temple al huevo, dibujos al carboncillo, pasteles y acuarelas, organizadas según los lugares que él frecuentaba y en los que desarrolló su creatividad, pintando al aire libre. En estas obras se encuentran paisajes de Galicia, Castilla, Extremadura, Andalucía, Francia e Italia.
También se exponen 44 obras escultóricas entre las que hay tanto escultura urbana como religiosa, bustos y bocetos, realizados en diferentes materiales como el bronce, barro cocido y resina.
Entre las obras que se exponen hay una pequeña escultura del autor nunca antes expuesta, se trata de la primera escultura realizada por el autor titulada ‘CABEZA CRISTO’ realizada en 1943, cuando tenía 13 años.
Fernando Mayoral
Nació en 1930 en Valencia de Alcántara (Cáceres). En 1947 ingresa en la Escuela de Nobles y Bellas Artes de San Eloy y en la Escuela de Artes y Oficios de Salamanca. Más tarde estudió en la escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando y en Italia. Ha ejercido la docencia como catedrático de Dibujo en el Instituto «Torres Villarroel» y como profesor asociado de escultura en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Salamanca.
Es el autor de numerosas esculturas de Salamanca como el conjunto escultórico dedicado al arquitecto Alberto de Churriguera y a José del Castillo ubicado en la Plaza de Poeta Iglesias; la escultura del conde de Francos, que se encuentra en la entrada noble del Consistorio; la escultura del matador de toros Pedro Gutiérrez Moya, la de San Juan de la Cruz, Torrente Ballester y el busto del empresario y mecenas Germán Sánchez Ruipérez. También ha esculpido los medallones de Churriguera, Lord Wellington, Tomás Bretón y Carlos II, en la Plaza Mayor. Y realizó la escultura de María Auxiliadora, que se encuentra en la entrada de la iglesia del mismo nombre. Así como la escultura de Vicente del Bosque que está ubicada en la Plaza del Liceo.