Salamanca y la bicicleta. Cuando hablamos de este binomio, hay una entidad que, irremediablemente viene a nuestra mente: el Club Cicloexcursionista Amigos de la Bici. Desde Savia Salamanca han hablamos con Ángel Blanco, uno de sus miembros más veteranos, con el que repasamos la historia, la filosofía y la actividad de este club y que nos trasmite su pasión por la bicicleta como un vehículo que permite descubrir, disfrutar y compartir.
Amigos de la Bici se creó en el año 78, como alternativa a los clubs de ciclismo de competición “siguiendo el espíritu del cicloturismo francés, el llamado turismo de alforja, nuestra visión era organizar marchas no competitivas, dar a conocer el cicloturismo y promover el uso de la bicicleta en la ciudad de Salamanca, siempre nos hemos considerado un club inclusivo y anticompetitivo”, nos cuenta este miembro histórico de la entidad.
Los miembros de Amigos de la Bicicleta fueron ya, en esta época, “visionarios” de un modelo de ciudad con una forma de moverse saludable y sostenible y es que, ya en el año 78, de la mano de este club, Salamanca fue una de las primeras ciudades españolas en celebrar el Día de la Bicicleta “nos juntábamos 4.000 ó 5.000 bicicletas para animar a su uso como medio de transporte e incluso enseñábamos a montar a aquellas personas que no sabían, a través de una Escuela de la Bicicleta, que se realizaba los sábados por la tarde” recuerda Blanco.
La promoción del uso urbano de la bicicleta fue, por tanto, uno de los pilares de la creación del club, una filosofía que ha evolucionado hasta el momento actual en el que, según nos revela Blanco “nuestra prioridad es promover la convivencia entre formas de movilidad en Salamanca: vehículos, peatones y bicicletas debemos compartir el espacio público y garantizar la seguridad de todas las personas” destaca Blanco.
Junto con esta línea centrada en la bici como medio de transporte urbano, el club tiene otros dos ámbitos de actividad fundamentales: el cicloturismo o realización de excursiones de larga distancia sobre dos ruedas por toda la geografía española “en los años 80 se hacían grandes excursiones de larga distancia a lugares como Pirineos, Sierra Nevada… aún hoy organizamos salidas randonneurs (ciclismo de larga distancia no competitivo) y acuden personas de toda España, nos dicen que acuden por nuestra filosofía y es que nos gusta pensar que somos un club con un espíritu diferente, sacamos nuestras bicicletas viejas y disfrutamos de lo que nos gusta, sin competir, ayudando siempre al que queda al último”, destaca orgulloso.
Y la labor de Amigos de la Bicicleta no acaba aquí, porque su tercera línea de actuación se centra en el cicloexcursionismo, el fomento del descubrimiento de la provincia de Salamanca y su riqueza natural y patrimonial a través de salidas cicloturistas. Y es que, tal y como este club ha demostrado y sigue haciendo a través de su programación anual de actividades, la bicicleta es una forma ideal para conocer nuestro entorno natural para cualquier tipo de personas. De forma habitual organizan excursiones a lo largo del río Tormes, para descubrir los jardines de la ciudad o árboles significativos de la zona urbana y alrededores, las llamadas “catedrales vivas”, es su forma de fomentar el conocimiento y puesta en valor de los recursos naturales de Salamanca y también de cuidarlos ya que, periódicamente, incluso organizan actividades de limpieza de residuos en zonas concretas. “La bicicleta está más de moda que nunca pero nosotros queremos difundir una concepción diferente, alejada de la competición, la bicicleta ligada al placer de viajar, de descubrir la naturaleza, de compartir con otros” concluye Ángel Blanco.