La programación de las Ferias y Fiestas continuó ayer con la jornada de puertas abiertas en la que participaron veintidós espacios culturales e institucionales de Salamanca.
A las 13:00 horas la Banda Municipal de Música, dirigida por Mario Vercher, ofreció un concierto en la Plaza Mayor en el que interpretaron las grandes bandas sonoras de la historia del cine.
Los juegos e instalaciones de Cirkomotik mañana se trasladaron a las pistas deportivas del barrio de Vistahermosa para que los vecinos de esta zona pudieran disfrutarlos desde las 17’00 a las 20’30 horas.
Dentro del Festival de Artes de calle estaban programados dos espectáculos. A las seis de la tarde el salmantino Pedro Majo ofreció el espectáculo ‘Magic Coctel’, en el parque de la Alamedilla. En esta propuesta hay ilusión, magia y diversión, adornado con un poquito de humor.
Y a las 19:00 horas, en el Patio Chico dio comienzo el espectáculo ‘NüShu’ de la compañía Capicúa. Acróbatas que cosen, bailan, ríen y trepan. NüShu es un lenguaje a través del cuerpo, del silencio, del caos, un lenguaje entre madres, abuelas, hijas y compañeras. Un espectáculo sensible, humano y divertido.
A las ocho, en la Plaza de Barcelona, tuvo lugar la actuación de La Duda Ofende, una banda vinculada a la Escuela Municipal de Música. Su repertorio está formado por versiones de éxitos de pop y rock desde los años 80 hasta la actualidad, tanto en inglés como en castellano. La puesta en escena es la de una banda de rock & roll que anima al público a participar cantando estribillos que conoce al ritmo de temas que le gustan.
Y finalizó la programación de ayer con el concierto de Soul Teller en la Plaza Mayor, a partir de las ocho y media de la tarde. En 2023 está celebrando su aniversario de más de tres décadas componiendo y cantando Soul, Rock, R&B, Funk… dentro y fuera de nuestras fronteras. Acompañado de super banda de Soul & Rock, SOUL TELLER es seguramente el front-man más potente del panorama musical actual. Ha trabajado y compartido escenario con artistas legendarios como Percy Sledge, Bonnie Tyler, Solomon Burke o Rod Stewart, con sus más de diez discos editados y sus treinta años de carrera entre Londres, Memphis y Madrid hacen que no haya audiencia que se le resista.