La fotografía de hoy es de Teresa Lucas Rodríguez. Imagen nocturna de la calle Palominos de Salamanca con la iglesia de la Clerecía de fondo.

La inclinada orografía de la zona provocó que la escorrentía de las aguas pluviales esculpiese un escarpe que los antiguos salmantinos utilizaron como base para construir la cerca vieja.

Al parecer era frecuente encontrar palomas torcaces a lo largo de la pendiente, razón por la cual adoptó el nombre de «Palombino» (crías de palomas silvestres) que con el tiempo se trasformó en «Palomino» y se pluralizó a «Palominos». Se la menciona en documentos del siglo XIII como «cal de Palombino» y Gil Gonzalez Dávila la nombra como «Calle de Palomino» en 1606.
La Calle perdió su tramo superior, a finales del s. XIX, con el trazado de la Rúa Nueva.