Redmadre pertenece a una fundación nacional con la misión de apoyar a cualquier mujer embarazada que se encuentre en una situación de vulnerabilidad. La idea nace en el año 2010 tras observar que el número de mujeres que abortan por falta de apoyo cada vez es más elevado. Para acabar con esto, Redmadre hace de enlace entre las autoridades del gobierno y la realidad que viven estas mujeres para que la ley pueda protegerlas. Gracias a ello Castilla y León fue la primera comunidad autónoma en la que se promulgó la Ley de Protección a la Mujer Embarazada, comúnmente conocida como la Ley Redmadre.
La función principal de la asociación es acompañar a las madres y luchar junto a ellas durante sus embarazos no idílicos. Ya sea por discriminación en el puesto de trabajo, por suponer una dificultad para continuar con sus estudios, por miedo a comunicarlo en el entorno familiar, presión de los servicios sociales públicos, por elección de la pareja o simplemente por inestabilidad económica. Aparte Redmadre es la única entidad de toda Salamanca que se encarga de dar apoyo en el caso de síndrome postraumático tras un aborto.
La fundación busca crear un itinerario integral y personalizado para cada madre, dependiendo de las necesidades y circunstancias de cada una de ellas. Con atención a nivel emocional, dando formación sobre temas de crianza o sobre el embarazo, talleres de autoconocimiento para que reconozcan su valía, formación para que puedan acabar sus estudios y ayudarlas a encontrar un empleo. Y por supuesto con recursos para el bebé, desde pañales hasta ropa de premamá. “Tratamos de que el embarazo que se ve como una traba o dificultad se convierta en una oportunidad para el cambio”, cuenta Loreto Cibanal, coordinadora de Redmadre.
Desafortunadamente son muchas las mujeres que se encuentran en esta situación, y son más de las que acoge la asociación. Ya que por desgracia muchas de ellas no acuden a pedir ayuda y se quedan sin recibir el apoyo que se merecen, sin poder sentir que no están solas. Sin embargo el número de usuarias de Redmadre va en aumento, gracias a que cada vez se reconoce más su labor, ya sea por el boca a boca entre ellas o por los servicios sociales.
Actualmente llegan a las noventa mujeres por año, aunque en estos dos últimos años son menos las usuarias continuas. Debido a un contrato en el que se comprometen a no solo recibir recursos materiales, sino también a asistir a citas de formación para el empleo u otros trámites que requieren de su esfuerzo. De esta forma quieren conseguir que ellas puedan valerse por sí mismas lo antes posible.
“No sé quién ayuda a quién, el tiempo que dedicamos a ayudar a estas mujeres enriquece a nivel humano, nos hace relativizar nuestros problemas y se convierte en una lección diaria” explica Loreto para Okey Salamanca. Si quieres ayudar, la entidad busca voluntarios tanto para organizar y repartir los recursos que llegan, como profesionales de cualquier ámbito, médicos, abogados, psicólogos… Cualquiera que esté dispuesto a colaborar.