Tras una destacable 5ª posición, el mejor puesto en una década, el Club Balonmano Salamanca cierra una temporada espectacular de 36 puntos en el grupo E de 1ª división nacional. Hablamos con su capitán y directivo Sebastián Elena, recientemente galardonado por Okey Salamanca con el Botón Charro de Oro Especial, por su trayectoria deportiva en el día en el que además renovó una temporada más en el club.

En sus inicios, Sebastián confiesa que era de fútbol y que empezó de casualidad a jugar al balonmano. Al no salir equipo de fútbol sala en las actividades extraescolares de su colegio, decidió apuntarse a balonmano por sus amigos. “Lo que empezó en el patio de un colegio lleva ya 35 años.”

En la actualidad, después haber anotado más de 90 goles esta temporada, el pivote se ve en un gran estado de forma a sus 41 años. Para él la creencia de que la edad óptima del deportista es en torno a los 26 años está muy alejada de la realidad, especialmente en balonmano. “La veteranía es un grado. Evidentemente no corres como cuando tienes 20, pero te puedo asegurar que mis mejores años han sido del 2007 en adelante.” Lo que ve realmente difícil es compaginar el deporte con el trabajo. Los integrantes del club entrenan nueve horas de gimnasio y seis de pista a la semana, además del partido semanal con su desplazamiento.

En cuanto a la temporada, comenzó cargada de incertidumbre, el equipo charro abría el año con el quinto entrenador en cinco años y una pretemporada desajustada con el nivel del conjunto. “Nos confundimos desde la dirección técnica en preparar partidos y nadie pensaba que íbamos hacer el papelón que hemos hecho.” Sin embargo, conforme el equipo se fue adaptando al juego de Juan Martín del Boca, el nuevo entrenador, la temporada comenzó a ir viento en popa. “Llegamos todo el equipo a Navidades en un estado de forma espectacular.”

El estilo que propone el técnico argentino es muy físico, sustituyendo el ataque posicional al que estaban acostumbrados por el contraataque. No obstante, gracias a la mejora en las instalaciones brindadas por el Ayuntamiento y al entendimiento a nivel interno, ha surtido efecto. “Cuando entrenas bien y hay una comunión entre el equipo y el entrenador, se da en los resultados.”

De cara al futuro, el salmantino se sigue viendo vinculado al club. Cree en el proyecto venidero encabezado por Manolo Carretero y formado por miembros con veteranía en la directiva. “Seré yo el que me vaya del balonmano y no el balonmano el que me eche a mí.” Además, con respecto a la temporada que viene, Sebas se muestra optimista al saber que contarán con Juanma y podrán arrancar ya conociéndose y sabiendo a lo que quieren jugar.

Ahora, tras unas semanas superando una inflamación en el ligamento, el capitán del Congesa XXI Balonmano Ciudad de Salamanca se encuentra bien y esperando que se cuente con él para la temporada que viene tanto a nivel deportivo como institucional. También aprovecha para hacer un llamamiento y visibilizar el balonmano en el ámbito local y nacional. “Creo que un equipo en 1ª división nacional, que lleva el nombre de Salamanca a la mitad de España, merece más visibilidad. Esperemos que, por lo menos, el balonmano en Salamanca siga adelante y siga creciendo.”

Rodrigo del Val Ortega