La fotografía de hoy es de Alberto Martín. Imagen de la torre de la Catedral de Salamanca.
El campanario sufrió graves desperfectos durante el terremoto de 1755, llegando a inclinarse e incluso amenazar ruina. Tras consultar a varios arquitectos que recomendaron su demolición fue, finalmente, Baltasar Dreveton quien propuso zincharla con 8 cadenas tensadas y forrarla con piedra en forma de talud llegando hasta el cuerpo de campanas (unos 40 metros desde el suelo). De la dirección de esta obra se encarga Jerónimo García de Quiñones con Manuel de los Ríos. Así puede contemplarse actualmente, forrada de piedras e inclinada hacia uno de sus lados por efecto del terremoto de Lisboa.