El Museo de Historia de la Automoción de Salamanca presenta su nueva pieza del mes. En esta ocasión se trata del Morgan 4/4 2 Seater del año 2008. Un vehículo Roadster emblema de la alegría, los reencuentros familiares, la paz y el amor y otros muchos sentimientos positivos.

Este vehículo, además de encontrarse expuesto en la colección permanente del MHAS, se ofrece para el traslado de niños y jóvenes pacientes recuperados de cáncer gracias a la iniciativa solidaria que surgió en 2019 fruto de la colaboración del museo con Pyfano y la Asociación Española Contra el Cáncer. De este modo, pueden abandonar su tratamiento del hospital a bordo de este magnífico descapotable.

Con esta apuesta se pretende dar mayor visibilidad a la labor de tantas personas comprometidas e implicadas con las personas que padecen cáncer y sus familias, -en especial jóvenes y niños-, para hacer su vida más fácil. Así, el Museo de Historia de la Automoción continúa potenciando su dimensión social y solidaria, presente en gran parte de sus actividades.

El automóvil, cedido por un particular (Antonio L. Sánchez Calzada), continúa el catálogo de Morgan sin apenas modificaciones con respecto a su diseño base de 1936. Es el mismo modelo, adaptado al presente, con el que la fábrica construyó su primer automóvil de cuatro ruedas. Un vehículo ágil, con una carrocería estrecha y con unas líneas ampliamente deportivas, que actualmente puede presumir de ser el modelo en producción más antiguo del mundo.

La británica Morgan Motor Company, fundada en el año 1910, es una de las compañías más importantes y una de las pocas marcas con más de 100 años de historia. Creada por Henry Frederick Stanely Morgan, se caracteriza principalmente por la fabricación de deportivos hechos a mano y que durante su historia conseguían grandes premios. A día de hoy es una de las pocas empresas británicas que continúa su fabricación artesanal, junto a la aplicación de la tecnología más vanguardista y adecuada a cada uno de sus modelos. Dispone de unas instalaciones fabriles transparentes, que son visitadas al año por más de 35.000 personas de todo el mundo.