Digitalización tridimensional, análisis big data, monitorización e inteligencia artificial para predecir problemas arquitectónicos en edificios con alto valor patrimonial. Quizá el futuro de la conservación en este tipo de inmuebles esté llegando de la mano de la Universidad de Salamanca (USAL) y uno de sus proyectos más disruptores: un gemelo digital de sus Escuelas Mayores.

Tal y como explica el propio centro universitario, actualmente las actuaciones de conservación de edificios con valor histórico y cultural en Europa «no responden a criterios estandarizados» y, fundamentalmente, se ejecutan cuando surgen graves problemas de deterioro estructural.

Además de tratarse de una tecnología no invasiva, «ha permitido, en el caso de la Universidad de Salamanca, obtener unos resultados asombrosos de altísima precisión, con radiografías inéditas de un edificio tan complejo como el de las Escuelas Mayores».