La piscina natural más animada y fresca

Mientras en Salamanca hay algunos pueblos que parecen esconder sus piscinas naturales para que no acudan ‘forasteros’, otros las promocionan y las lucen con orgullo para aprovechar su inmenso potencial turístico. Un perfecto ejemplo de esto último es Villasrubias y su piscina natural del río Frío.

Este afluente del río Águeda que destaca, como su propio nombre indica, por sus frías aguas, nos regala al pie de la carretera CL-526 una de las zonas de baño más espaciosas y cuidadas de la provincia de Salamanca. El Ayuntamiento de Villasrubias, consciente de su atractivo, ha creado una gran zona verde dotada de sombrillas, vestuarios y baños. Los que quieran extender allí sus toallas o sillas deben pagar un simbólico precio de 1 euro que ayuda a su mantenimiento. El baño en el río es gratuito como es lógico.

La piscina natural de Villasrubias ganó en popularidad el pasado año 2020. El motivo fue que muchas personas de las localidades cercanas de la Sierra de Gata cacereña la eligieron para refrescarse en verano. El cierre de algunas de las zonas de baño de estos pueblos, propició esta movilidad que se ha mantenido también en 2021. Solo hay que acudir cualquier día de la semana y comprobar el ambiente que se genera.

Para asumir esa gran afluencia de visitantes, el entorno de la piscina posee una amplia zona de aparcamiento. Además, existe una zona de merenderos y un chiringuito. Todos los ingredientes para pasar una agradable tarde de verano en una de las comarcas más desconocidas y al mismo tiempo más bellas de Salamanca, El Rebollar. Precisamente los robles rebollos que dan nombre a esta tierra son los que abrigan el entorno de la piscina. Un paisaje de ensueño.

El acceso al agua es muy cómodo gracias a una rampa y a una escalera. Una vez dentro tenemos diferentes profundidades. Para los más pequeños existen un espacio separado de escasa profundidad que también se nutre de las aguas del río Frío.

Es una información de La Gaceta de Salamanca.