La fotografía de hoy es de María José. Una imagen de la entrada a la iglesia de La Purísima.
La fundación del convento se debe a Manuel de Zúñiga y Fonseca, Conde de Monterrey, en 1636 para albergar a su hija, Inés Francisca de la Visitación, que fue priora del mismo. Las obras finalizaron en 1687. El Convento se sitúa frente al Palacio de Monterrey, residencia del mecenas. La Iglesia de la Purísima, parte pública del convento, fue pensada por el conde como capilla funeraria para sí y su familia.
En su interior, destaca el Retablo Mayor en mármol, con un importante cuadro de la Inmaculada Concepción, obra de José de Ribera (1635) y modelo para gran parte de los pintores del Siglo de Oro.