[Galería de fotos y vídeo] Viacrucis en viernes de Cuaresma
En la tarde del viernes se celebraron dos viacrucis en la capital. El primero, en oración por los cristianos perseguidos, contó con la presencia de una cruz rescatada de una de las iglesias católicas profanadas por el Daesh en el valle del Nínive. Esa cruz simboliza “la barbarie a la que es sometida la población cristiana de Irak”, subraya Ignacio Manzano, responsable en Salamanca de Ayuda a la Iglesia Necesitada.
Con el rezo de este Via crucis se pretendió dar voz a miles de cristianos que son perseguidos, humillados o discriminados a causa de su fe en numerosos países del mundo, y se invita a tenerles presentes en las oraciones de cada día, de una manera especial en este tiempo de Cuaresma.
Las estaciones de este Via crucis fueron Nigeria, Kenia, Sudán, Siria, Irak, Pakistán, Egipto y muchos países más, donde Jesús está condenado a muerte, carga con su Cruz, cae y consuela a los oprimidos. “De esta manera experimentamos la comunión con nuestros hermanos, podemos rezar por ellos y nos hace crecer en la fe”, como afirma Javier Menéndez, director de Ayuda a la Iglesia Necesitada.
La Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada fue promovida por el papa Pío XII e iniciada por el P. Werenfried van Straaten en 1947, con el objetivo de apoyar a la Iglesia católica en países de verdadera necesidad, a los miles de refugiados y a los cristianos perseguidos en el mundo a causa de su fe.
El segundo viacrucis se desarrolló bajo el lema “Fortalecidos en la Cruz”. Las Delegaciones diocesanas de Pastoral Juvenil y Universitaria organizaron el IV Via Crucis Joven diocesano en la Catedral Nueva de Salamanca. El acto, fue presidido por el obispo de la diócesis, Carlos López Hernández, y contó con la participación de una representación de grupos juveniles y universitarios, colegios y cofradías.
“No hay mayor fuerza, no hay mayor impulso, que el Espíritu salvador que Cristo nos entrega en la Cruz, cuando muere por cada uno de nosotros”, afirmaron los responsables de las delegaciones de Pastoral Juvenil y Universitaria, al describir el lema elegido para esta nueva edición del Via Crucis Joven: “Fortalecidos en la Cruz”.
El via crucis o “camino de la cruz” consiste en acompañar a Jesús en su camino desde el pretorio hasta el monte Calvario mientras cargaba con la cruz. Este año estará marcado por el coronavirus a lo largo de las catorce estaciones del via crucis y se escuchará la voz de personas “cuyo testimonio nos acercará, de una manera muy especial, a la dura situación que hemos vivido”, apuntan los organizadores. Como es el caso de los sanitarios, “que han vivido la pandemia en primera línea”; personas sin hogar, “que han sufrido el azote de la COVID-19 desde la desprotección de la calle”; o los que han perdido a sus seres queridos, “en la más angustiosa soledad”; o de quienes acompañaban a los dos o tres familiares que enterraban “a sus difuntos en el cementerio, casi en soledad”.
Este IV Via Crucis Joven “pretende ser un momento de encuentro, de oración y reflexión personal, en el que recordemos lo que hemos vivido, pongamos nuestro sufrimiento a los pies de Jesús, y le acompañemos, desde nuestra realidad, en su camino hacia la Cruz”, señalan los responsables de las Delegaciones de Pastoral Juvenil y Universitaria, quienes invitan a participar a todos los jóvenes de la provincia en esta celebración en la que además de renovar su fe, “quiere ser muestra del compromiso que tiene la juventud salmantina con aquellos que más sufren, que más nos necesitan”.
Fotografías y vídeo de Juan José García.