El fotógrafo Legar68 nos ofrece este precioso reflejo en el agua que cae estos días. Parece que el cielo se une a la tristeza de tantos empresarios, especialmente hosteleros, que pasan momentos muy complicados. A pesar de todo Salamanca ofrece un decorado para tantos establecimientos que los hace únicos en el mundo. Volveremos a sentarnos en nuestra Plaza y disfrutar de esta belleza.